Review | Tyga – Bugatti Raww
A estas alturas el artista Tyga es el máximo exponente del trap, un género que continúa suscitando controversia entre los fans de la música urbana. Un sonido contundente y 100% new school es lo que nos encontramos en este «Bugatti Raww».
El rey ha vuelto. No puede estarse quieto y vuelve a sacar nuevo trabajo después del exitoso «B*tch I’m the Sh*t 2» de este mismo año. Se trata de una mixtape que lleva por nombre «Bugatti Raww» y qué se puede decir que no se sepa de Tyga… Sabe sacar partido a las potentes bases de DJ Smallz como solo él puede hacer. Todo lo que toca se hace oro y este álbum no iba a ser menos.
Todo comienza con «Hello I’m Ballin», sonido propio y pegadizo que sirve perfectamente como arranque, soportado por una base trapera clásica sin florituras, perfecta para dar un sonido puro al tema. Todo cambia con «Nigga Wit Money», un track más directo y agresivo con un mensaje más que obvio, el clásico fantasma del dinero. «Nasty Nasty» viene introducida por una voz femenina que se reitera a lo largo de la pista como estribillo. Con una letra casi hablada sobre una potente base se reproduce un futuro hit de Tyga sin la menor duda. Para «Good or Bad» cuenta con la aportación de A.E. consiguiendo que más de tres minutos de tema se pasen volando.
Llegamos al ecuador de la mixtape con «Mercedes Baby» un tema lento y tranquilo que roza el pop más comercial con la colaboración de 24hrs en una loable muestra vocal. Para «Sign Up» se presenta algo más diferente, el sonido de guitarra de base a la que se le irá sumando el beat de DJ Smallz en lo que se puede considerar una balada propiamente dicha. El momento más inspirador llega con dos piezas largas de cinco minutos de duración como «Forever On Fire» y «Lil Porsche». La primera más rápida que la segunda, manteniéndose a un medio tempo. Por último, la ligera «Stay In School» cierra un álbum de lo más variado que está a la altura de un renombre tal como el de Tyga.
Si el trap y el rap no estuviesen tan enfrentados como diferentes culturas en lugar de una variante de la misma los raperos idolatrarían a este artista. Sin embargo, se tiene que vivir con el peso de dos masas en continuo enfrentamiento innecesario que podrían coexistir aumentando y retroalimentando el poder de esta cultura.
