Review | Metal Pesado – Seísmo
No todo lo que reluce es oro. En los últimos años, la música urbana ha sufrido una expansión, mediatización y una evolución impensable hace una o dos décadas. Ya son numerosos personajes públicos del internet que se suben al carro de la música como una especie de hobbie, porque el elevado número de seguidores garantiza las visitas de forma casi segura. Esta es la vía fácil, lo difícil es mantenerse durante décadas en la escena sin perder ni un ápice de ganas como si del primer disco se tratase. El madrileño-alicantino Metal Pesado pertenece a este tipo de artistas y, a finales del año pasado, vio la luz “Seísmo”, su trabajo más reciente desde sus inicios en el mundo del rap hace más de 20 años.
Nada más arrancar el tour por este álbum de 14 cortes, podemos notar un cierto cambio de sonido en la introductoria “Sinopsis”. Como el propio nombre indica, un resumen agresivo-perfecto de su “yo” y de su forma de rapear pero sorprende gratamente la adaptación a una instrumental más moderna. Esto es uno de los puntos importantes de todo artista, intentar innovar, probar diferentes sonidos y no estancarse en la monotonía. La nocturna “Cuerpo y Alma” es otro ejemplo más de la experimentación de Pedro.
Tras este arranque agresivo, prosigue “Catarsis de Metal” sobre el clásico bombo y caja hardcore en el que se desahoga y libera a base de unas estructuras perfectamente ejecutadas. Siempre es un placer escuchar los juegos métricos y sintácticos porque es una de las formas de “medir” la capacidad lírica de los artistas. Y está claro que Metal Pesado no anda justito en este aspecto. Barras. Pinches barras.
Además del sonido, también se aprecia un cambio conceptual del disco. Como nos explicó en una entrevista previa, se trata de un álbum más interior, enfocado sobre todo a los diferentes estados de ánimo. Así como en “Catarsis de Metal” se desahoga, en “No Te Cortes” convierte los ‘insultos’ en análisis de su persona e ideología, en “Peso Pesado” expone los objetivos y su figura de rapper o demanda los cambios de diferentes ámbitos en “Yo Reclamo”.
A pesar de ello, su esencia contestataria siempre está presente. Son los cortes como “Odio como Alimento” en colaboración con Iya Emblem y El Siervo o “Desobediente” – cuyo sample en el estribillo evoca a GTA San Andreas” – en los que aborda la política en mayor medida, definiendo sus valores e ideología política muy ligada hacia la izquierda española. E incluso en el métrico “Cerdo”, con un flow que me recuerda a Sho-Hai en ciertos tramos del tema. Y aquí reside el kit de la cuestión, ¿el rap puede ser de derechas también? Dejo espacio para reflexiones.
El resto del álbum lo componen otros temas como “Sin Más”, “Tan Cerca”, “Equis” o el tan West Coast “Today is the Day” con voces de Bárbara Leeguez. Un total de 14 canciones que conforman un disco muy completo a nivel de rapeo y contenido, porque lejos de buscar las visitas es un álbum hecho con un porqué, un fin y un final inmejorable; dedicándole con su “Máquina del tiempo” una oda a lo que le acompaña en su vida desde hace más de 20 años, la música.