“Papi Juancho”, el último agradecimiento de Maluma

El artista colombiano sigue siendo uno de los principales estandartes del género urbano
Así se hace llamar el último disco del artista colombiano Maluma, cuyo contenido alberga un sincero agradecimiento a sus raíces y a todas aquellas personas que apostaron por él cuando su nombre sonaba únicamente, pero con fuerza, en su barrio natal: Envigado.
Recabando en su humilde pasado, Maluma fue aconsejado por numerosos artistas que en su momento estuvieron en la cima del reguetón old school, de la talla de Jery Boy o Ñeng o Flow , y que este ha querido agradecer colaborando con ellos en canciones que contiene este nuevo disco.
Adentrándonos en el diverso contenido del álbum, apreciamos varias vertientes sentimentales: desde la más pura nostalgia de su tierra, como representa ‘Medallo City’, hasta la más sincera historia de amor, ‘Amor de mi vida’.
Centrándonos en esta última canción, Maluma ha querido contar la historia de una persona enamorada tras un proceso: la aparición de un primer amor constituido por la espontaneidad y sinceridad derivada de la inexistencia de los prejuicios sobre el amor que acarrean falsas expectativas, que acaban desembocando en una momentánea frustración.
Tras esto, llega en un espacio y tiempo desconocidos nuestro amor a primera vista, cuyo objetivo no es más que subsanar aquellas heridas fruto del primer amor que ya tratamos de olvidar.
De la misma manera, de acuerdo con el tema principal de la canción, este desarraigo evoca en la eliminación del dolor para convertirlo en el amor de nuestra vida. Ese verdadero amor que tanto cuesta encontrar y que para nada es impredecible. Con dicha persona lograremos entablar varias conversaciones, siendo el dolor de las pasadas relaciones un tema subsanado.
“Cuando los años nos pesen
Y las piernas no caminen
Los ojos se nos cierren
Y la piel ya no se estire”
Detallando la letra de la canción, predomina el disfrute del día a día y la elaboración de futuros planes junto a esta persona. Una vida eterna juntos, sin importar la implicación de agentes físicos, pues nada puede vencer al amor. Ese es el amor eterno, fundándose en solo una persona, presenciando la más utópica e idílica relación en un sueño convertido en realidad. Y es ahí cuando sentimos esa unión impredecible, ansiada y, sobre todo, inesperada.
Tomando el mismo hilo, la unicidad musical de Maluma ha arrojado luz a otros atípicos temas como ‘Hawái’, una herida cubierta por otra aún más fuerte. Hacer creer una felicidad que todavía no se ha conseguido para fingir un deseo hacia el pasado, evocando recuerdos cuyos protagonistas recuerdan inherentemente.
Con un simple ‘Me acuerdo de ti’ trata de conseguir un perdón ansiado que necesita. Quizá derivado de un subyacente y sucio engaño que clandestina una relación que quiere retomar per se.
Con esta nueva entrega, el colombiano ha querido abrir su corazón en todas las índoles afectivas: desde su entorno juvenil en su humilde barrio de Envigado, pasando por contar una inefable historia de amor. Sin duda, el artista ha querido abrirse en canal con este nuevo disco y ha conseguido captar la atención de muchos.