El «sold out» del millón | Kidd Keo

El «sold out» del millón | Kidd Keo

Después de reventar los escenarios en Argentina y México, el 4 de mayo a Kidd Keo le tocó jugar en su propia casa; Alicante. La multitud de jóvenes se volvió loca tras la confirmación del concierto y a pesar de no ser la primera vez que este artista urbano actúa en la ciudad que le ha visto crecer, las ganas de verle en directo nunca han desaparecido. Con todas las entradas vendidas, la ilusión, y las expectativas eran grandes. Y Kidd Keo, a diferencia de Cristiano Ronaldo, no defraudó.

Eran apenas las 19:00 de la tarde -dos horas ante de la apertura de puertas- y la gente ya se acercaba al recinto para estar entre los primeros en cruzar por la puerta. Incluso algunos calentaban con sus canciones puestas en los coches. Conforme pasaba el tiempo la cola aumentaba de una forma escandalosa, de tal modo que ocupaba toda la calle de la manzana y no es de extrañar, el trapero consiguió el ‘sold out’.

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Antes de que Kidd Keo saliera al escenario, fue un DJ el encargado de caldear el ambiente con la música trap durante más de una hora sustituyendo a Yung Sarria y Neelo. Estos artistas invitados finalmente no actuaron por problemas personales con Keo y quizás por este motivo el concierto se hizo demasiado corto.

Eran las 22.45. La sala estaba llenísima y la desesperación aumentaba pero de repente, bajaron tanto las luces como la música. Algo se escocía. Y así era. Después de una larga espera, apareció entre los humos la estrella de la noche con una camisa negra, sonriendo, como todas las personas en la sala. El ambiente era tan acogedor que a Kidd Keo le bastaban solo unos 5 segundos para que el público se dejase la vida con «Klk, dime klk» al ritmo de la base de Mask Off.  Era el primer tema cantado durante la noche pero parecía que llevásemos más de media hora.

Siguió con el track electrónico producido por MadBass. Ya os podéis imaginar de cuál se trata. Nos teletransportamos para escuchar Back To The Future. Por un momento pensábamos que enfrente estaba Marty McFly pero no, era Kidd Keo haciéndonos volar por el tiempo. Y hemos volado hasta las estrellas, donde continuó con Superstars. Una canción más relajada que no impidió que el público cantase y bailase. La gente se lo estaba pasando en grande por todo menos por el calor generado, pero ahí estaba el alicantino para refrescarnos con el agua de las botellas.

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También sacó a relucir sus «viejos tiempos» de Gotham aunque sean del año pasado. Tras «Understand Me«, uno de los puntos álgidos de la noche fue «Foreign«. Luces rosas en referencia a la plataforma COLORS donde grabó el videoclip, una mano arriba y en la otra los móviles grabando para Instagram Stories. No mentimos si decimos que en el estribillo predominaba la voz del público sobre la del cantante. En los versos no, que son en inglés.

Llegados al ecuador, la temperatura del ambiente aumentaba y Kidd Keo procedió a lo de siempre. Quitarse la camiseta. De fondo, gritos y algunas que otras bragas mojadas. Él ya tuvo claro que era el mejor momento de enseñarnos quién fue el primero en esto en hacer One Million. Aunque con el consiguiente IGot logró diez millones. No importó que fuese el tema más fresco, a nosotros nos dio tiempo a memorizar la letra y darlo todo mientras él saltaba teniendo a dos bailarinas de twerking al fondo. Y como recompensa, otros chorritos de agua para refrescarnos.

Después de escuchar lo nuevo, tocó disfrutar del ‘viejo’ Keo. Con Okey el ambiente bajó levemente pero recuperó la esencia con Me La Suda mientras de fondo brillaban las luces de verdes, amarillas y azules.

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Nosotros no lo sabíamos pero Kidd Keo sí. Se avecinaba el tempranero final del concierto y de ahí que se guardase los ases bajo la manga. Antes del segundo punto álgido y final de la noche, nos deslumbró con Trap Life. «Puta, droga, fama, shows, coca, haters, la vida de un boss» mientras las bailarinas volvieron a subir al escenario a bailar el twerking. Al acabar la canción, el público empezó a sacar los móviles y volver a grabar cuando escucharon la intro de Lollypop. Era oír «clap it up» y dejarse tanto la vida como las cuerdas vocales aunque la letra dejaba mucho que desear. Eran tres minutos puros de adrenalina y de energía. No era un concierto sino una fiesta y parecía que rozaba la perfección. Sin embargo, no pudo ser por la duración.

Cuando Kidd Keo terminó de cantar Lollypop, empezó a dar un discurso. Los que estábamos en la sala pensábamos que se trataba de una especie de descanso pero resulta que el trapero se estaba despidiendo. Cuando se fue al backstage todos pensábamos «es una broma» y «ahora volverá» pero no. El concierto se había acabado, y eso que duró menos de una hora porque, como hemos mencionado en la introducción, no actuaron ni Yung Sarria ni Neelo. Dicha corta duración dejó insatisfecha a una buena parte de las personas que asistieron al concierto porque tenían ganas de seguir volviéndose locas con el trap pero, aún así, Kidd Keo reventó Alicante.

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Fotógrafo: Juan Fernández

Redactor: Martin Halabrín

Martin Halabrin

Hablo sobre música sin tener ni idea de música

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